lunes, 27 de marzo de 2017

Poema

He soñado que mi locura moría,
he soñado que olvidaba la pasión que levanta,
desde mis entrañas,
mi cuerpo dormido
allá donde se encuentra...

He soñado que moría el amor,
Con el último romántico...
Y que era yo quien expiraba,
Durmiendo entre las hojas y los sauces,
En una ataúd lleno de sueños inconclusos.

He visto que el diario de Noa
Sustituía a desayuno con diamantes,
Que Sinatra era olvidado,
Por el rey de los cuarenta principales...
En un día tan frío.
Como muerta estaba mi cama.

He sentido caer a King Kong del edificio,
Empujado por telefilmes a mediodía,
tan cansados como mediocres...
Y sentí que las cartas que escribí
se marchitaron intactas...
Enterradas por aplicaciones baldías.

Se han dispersado los pasos de baile,
También el deshojar margaritas...
Murió la última gota de esperanza,
Y el mundo siguió rodando

1 comentario: