domingo, 12 de junio de 2016

Viaje a Lisboa

No me gustan las canciones de amor a medias tintas o las de amor canalla, no me gustan las canciones de amor con miedo al compromiso... me gustan las canciones que hablan de entregarse hasta quedar vacío. Y eso espero en estos instantes de mi vida para el resto de lo que me queda. Entregarme hasta morir completamente vacío, habiendo dándolo todo como un tubo de pasta de dientes metafórica de amor que se escurre hasta el último segundo de la vida.

Amo a Dios hasta entregarme a Él por entero, daría mi vida cien veces por mi hija si fuera necesario, pero siendo realista, no cogería el primer autobús a Lisboa para visitarla con ella, no tomaría el Transiberiano para encontrarme con mi mejor amigo a la puertas de la plaza roja, no volaría hasta tumbuctú para declararme a mi hermano, sería bastante raro... no lo haría aunque los quiero con todo mi corazón.

Sin embargo, puedo quedarme hasta las tres de la mañana mirando love actually, riendo y llorando, soñando... con la extraña esperanza de encontrar a alguien más allá del fluorescente brillo de la pantalla de un ordenador, con el extraño cruce de miradas que puede darse en cualquier espacio casual e inesperado. Sigo esperando el momento en el que el sueño se haga realidad, y encontrarte a ti, si tú... la mujer con quien sueño cada noche... puede que aún no te conozca pero ya te sueño.
La paciencia es un don difícil de cultivar, habiendo pasado el umbral de la tercera década de vida cualquiera le dice a mi corazón que la espera merece la pena, que las noches a solas acabarán algún día, que las camas estrechas quedarán en el pasado... Atrás quedaron los días en que mis manos sabían cómo tocar y mis labios como besar, hace tanto que encargué mi último ramo de rosas, hace años ya... y sin embargo esta calma chicha me hace pensar que la tormenta esta próxima a arreciar, y... que tormenta ha de ser cuando he estado soñando con ella ya tanto tiempo.

Lo que casi nadie sabe es que yo tengo la capacidad de navegar en esas aguas, de la mano del Dios de los ojos insondables y la voz que truena cual relámpago... volaré sobre la tormenta como un joven héroe vikingo, sonriendo y cantando a los vientos, agradecido por tener una tempestad contra la que remar...

Pero... ¿Que ven mis ojos? ¡Si mi bote ensanchó mientras pestañeaba! un hueco quedó libre a mi lado en el banco donde remo, hace mucho que lo ajusté para mi solo, pero, casi sin darme cuenta, se ensanchó... la tormenta espera, el agua está casi enrabietada... mi querido amor desconocido, yo ya te estoy esperando...


5 comentarios:

  1. Que bueno Guille, que el Señor te siga dando la paciencia y la esperanza de encontrar la mujer ideal para tu vida, BENDICIONES

    ResponderEliminar
  2. Que bueno Guille, que el Señor te siga dando la paciencia y la esperanza de encontrar la mujer ideal para tu vida, BENDICIONES

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Como siempre sorprendes con tus pensamientos sobre el amor. Ese amor que todos de alguna forma queremos pero que muchos temen conseguir, temen la entrega completa. Simplemente "tuyo", por lo tanto maravilloso.

      Eliminar
    2. Como siempre sorprendes con tus pensamientos sobre el amor. Ese amor que todos de alguna forma queremos pero que muchos temen conseguir, temen la entrega completa. Simplemente "tuyo", por lo tanto maravilloso.

      Eliminar
    3. Que bueno Guille que tierno, romántico y real.
      Recuerda que es el amor ágape el que te dará tan ansiado y esperado Amor.
      Estaremos orando por ello.
      Sigue escribiendo así.

      Eliminar